Con casi tres décadas de diferencia entre ambas, comparten algo personal como la danza, sin pretensiones y desde una mirada lúdica adoptan un espacio común en el que la transmisión aparece como punto de partida para hablar del paso del tiempo.
SERENITY SUITE es una pieza de gran madurezartística tanto en su escritura coreográfica como en su interpretación. El tema del “paso del tiempo” atraviesa toda la pieza, de manera sutil, sin gravedad, sin nostalgia. Un dúo donde Matxalen continúa mostrando su experiencia en la gestión del “espacio tiempo”. Con este trabajo ha abierto nuevos territorios que no había explorado anteriormente: transformaciones del rostro, inserción de textos. Hermoso momento donde vemos proyectado un video de Matxalen bailando un solo creado hace veinte años y Natalia baila en la escena este mismo solo en perfecta sincronización con la imagen del video (pura maravilla de precisión y de humildad) y con otra fisicalidad llega a ser muy fiel a la “partitura”.
¡Qué hermosa idea, muy sencilla, para evocar la transmisión! Por último, la música y el diseño de luces tienen una gran importancia en la creación de la atmósfera. El sonido de Itziar creado con delicadeza y meticulosidad: una música sobria, basada en pocos materiales sonoros se torna muy interesante. Un dúo extremadamente conmovedor con una expresividad muy discreta mezclada de abstracción. Una danza generosa, habitada y muy sobria a la vez; una danza que va a lo esencial y que irradia sin alboroto.
Dirección: Matxalen Bilbao
Intérpretes: Natalia García, Matxalen Bilbao
Música Original: Itziar Madariaga
Diseño de Luz: David Alcorta
Textos: Adriana Barestein
Fotos Vídeo: Itxaso Beistegui
Producción: Isabel Jiménez (Infinita Escena)
Subvenciona: Gobierno Vasco
Residencias artísticas: La FundicIOn, Utopian, Mallandain Ballet, Azkuna Zentroa, Kultur Leioa
Agradecimientos: Espacio Espiral Santander
