La URSS presentan presentan su último disco. Repertorio rápido, ligero, dinámico, ¿canciones viejas?, sorpresas, alegrías, piononos, descontentos, son pop, jóvenes, Andalucía, son punk, anticuado, GRANADA, ostracismo, bájate el ampli, mas lento, una mas, final.
Son un puño. Vulk se cierran, aprietan y golpean. Si Martin Hannett viviera, estudiaría y envidiaría el sonido de esta joven banda bilbaína. Suenan a humo y a acero. A madrugones y a tocho vista. A alienación y a rabia. En las canciones de su debut, Beat Kamerlanden, se dibuja el skyline de un paisaje post-industrial. ¿Post-punk o punk a secas? Depende de la canción. Algunos temas arrastran la pesadumbre de los días encapotados, y otros estallan corriendo desesperados hacia el final. En cualquiera de los dos casos, Vulk no podrían ser más expresivos. Ni más contundentes. Como un puño.
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